Una semana antes de las elecciones parlamentarias europeas, varios medios importantes de Alemania publicaron de modo sincronizado la noticia de que el exvicecanciller austriaco Heinz-Christian Strache estuvo debatiendo con una presunta ciudadana rusa, que después resultó ser una estudiante bosnia, la posibilidad de adquirir activos de unos medios con el fin de influir en los comicios.
"En cuanto a la pregunta sobre la estudiante bosnia rusoparlante, creo que todos aquí lo entienden bien, la rusofobia está ahora de moda, ya que permite obtener algunos dividendos significativos de los hermanos mayores", dijo el jefe de la diplomacia rusa al resumir una reunión con su homólogo esloveno Miroslav Cerar.
El canciller ruso recordó la frase pronunciada por la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, "highly likely" (es muy probable que), y aseguró que ese principio está actualmente en boga y "permite culpar de todo a los rusos".
"Llama la atención que los medios occidentales libres, que acogieron activamente la versión del origen ruso de la joven y luego empezaron a decir que era 'rusoparlante', recordando ese hecho constantemente, ahora, cuando se supo del origen bosnio de la estudiante, lo informan escasamente, o simplemente no lo revelan", subrayó Lavrov.
El diplomático hizo un llamado a los periodistas a "ser objetivos y escribir sobre lo que realmente ocurre".
Strache, que dijo que la joven era letona, calificó lo sucedido de una trampa y de plan de asesinato político, pero se vio obligado a presentar su dimisión.
Además: La Fiscalía de Viena comienza a investigar el vídeo que puso fin a carrera de Strache
El Gobierno de Austria y su jefe, Sebastian Kurz, fueron destituidos el 28 de mayo tras perder el 27 de mayo una moción de censura en el Parlamento, promovida por el partido Jetzt en medio del escándalo en torno al exvicecanciller.