"Los acusados dirigieron, promovieron y participaron activamente en la ejecución de una estrategia —a la que denominaron 'el procés'— perfectamente planificada, concertada y organizada para fracturar el orden constitucional con el fin de conseguir la independencia de la Comunidad Autónoma de Cataluña como nuevo Estado con forma de República, segregándola así del Reino de España", afirma la Fiscalía en un escrito remitido al Tribunal Supremo.
Es decir, que tras la celebración de 49 sesiones del juicio, una vez concluida la fase de prueba testifical en la que casi 500 personas prestaron declaración ante el Tribunal y a pocos días de terminar la fase de presentación de pruebas documentales, la Fiscalía y la Abogacía del Estado se disponen a elevar a la categoría de definitivas sus acusaciones.
En total, la Fiscalía y la Abogacía piden que sean condenadas por rebelión o sedición 9 de las 12 personas sentadas en el banquillo de los acusados.
La más destacada de las acusaciones es la que recae sobre el exvicepresidente del Gobierno catalán, Oriol Junqueras, para el que la Fiscalía pide 25 años de cárcel por rebelión, mientras que la Abogacía pide 12 por sedición.
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Para el resto de los acusados las peticiones de la Fiscalía y la Abogacía del Estado oscilan entre los 7 y los 17 años de prisión por delitos que van desde la rebelión y la sedición, hasta la malversación o la desobediencia.