"El paciente no dejó a la serpiente en la puerta. Los médicos tuvieron que convencerle para que la abandonara", comunicó el director principal del hospital, B S Chavan.
Según Chavan, los médicos han tratado a muchos pacientes que llegan de áreas rurales con serpientes venenosas.
"Las traen consigo porque quieren enseñar qué serpiente les mordió: si es venenosa o no. Es una reacción de pánico", aseveró el médico.
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