En el estado de Río de Janeiro, la Universidad Federal Fluminense (UFF), en la ciudad de Niteroi, acogió la protesta más importante: miles de jóvenes salieron del campus en ambiente festivo alertando de que los recortes tienen una finalidad ideológica más que económica, según comentaron varios manifestantes a Sputnik.
"El recorte no es sólo económico porque estamos en crisis, es ideológico, porque empezó primero en determinadas universidades a las que se quiere reprimir", explicaba Fabiana Amorim, estudiante de producción cultural, al recordar unas recientes palabras del ministro de Educación.
Para muchos estudiantes, el recorte anunciado por el Gobierno tiene algo de represalia, a pesar de que poco después de esa declaración de intenciones, el ministro amplió la medida a las más de 60 universidades federales y también a los casi 40 institutos federales (todos los centros de educación superior que dependen del Gobierno central).
Para Bruno Pacífico, estudiante de filosofía, la verdadera intención del Gobierno no es tanto luchar contra el llamado "marxismo cultural", como suelen afirmar los seguidores más radicales del presidente, sino simplemente lanzar una "cortina de humo" para privatizar las universidades públicas.
"Los anteriores Gobiernos colocaron a los pobres en las universidades, hubo una política de cuotas fuerte (reserva de plazas para negros, indígenas y estudiantes de baja renta) y aumentó la demanda hacia las universidades públicas, que consolidaron su prestigio, porque siguen siendo las de calidad, por eso hay mucha disputa económica en el sector de la enseñanza privada", aseguraba este joven.