Por un lado, amenaza a Cuba con un embargo "absoluto" si mantiene su apoyo al Gobierno venezolano, por el otro presiona al Gobierno de Malta para que prohíba a Rusia usar su territorio para llegar al país suramericano y aplica sanciones contra barcos que transportan petróleo venezolano para ahogar la economía del país.
✒️ Dominio mundial: cómo Latinoamérica y el Caribe acabaron en las garras de EEUU https://t.co/fhUIEbhHCx
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) February 12, 2019
Todo hace suponer que en El Pentágono sí que están barajando con mucho interés un bloqueo total para ahogar definitivamente al Gobierno de Nicolás Maduro y lograr su tan ansiada implosión social.
Ideólogos del bloqueo
La idea del cerco definitivo hacia Venezuela, ya había sido analizada durante una reunión secreta del 'think tank' estadounidense "Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales" (CSIS), llevada a cabo el 10 de abril de este año.
Uno de los invitados a la reunión fue Fernando Cutz, a quien el periodista Max Blumenthal ha llamado "el arquitecto del golpe de Estado en Venezuela".
Revealing comments from @fscutz, one of the key architects of the US coup in Venezuela, declaring that the goal of intervention is to “restore Venezuela’s place as an upper middle class country” https://t.co/jZsNLu5rWB pic.twitter.com/2IX8d1n41P
— Max Blumenthal (@MaxBlumenthal) February 15, 2019
Cutz, quien perteneció al Consejo de Seguridad Nacional del Grupo Cohen, asesoró estrechamente al embajador estadounidense William Brownfield, en torno a una estrategia para "dividir el círculo íntimo de Nicolás Maduro", reporta Blumenthal.
La 'opción Cutz' cobra relevancia visto el fracaso del Pentágono en su intento de dividir la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. Sin embargo, puede que no sea algo de corto plazo visto el poco consenso alcanzado en la región para apoyar una acción de corte militar en Venezuela.
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Si evaluamos sus declaraciones bajo el prisma de teóricos de la geopolítica como Nicholas Spykman, al parecer han entendido que lo importante no es controlar el 'Heartland' o núcleo de Venezuela, sino cercarlo (Rimland). Al considerar que las rutas terrestres y marítimas desde y hacia Venezuela están controladas en su totalidad por EEUU o por sus aliados regionales, esto le permitiría bloquear casi instantáneamente una o todas estas rutas sin la necesidad de una invasión o movilización de flotas.
Antecedentes peligrosos
En el 2017 EEUU realizó unos ejercicios militares denominados Tradewings a 600 kilómetros de las costas venezolanas. Los identificaron como "una maniobra multinacional de seguridad marítima y respuestas a desastres en el Caribe". En el 2018, llevaron a cabo los ejercicios multinacionales Unitas, donde Colombia era el anfitrión y participaron más de 18 países. La razón esgrimida para hacer el despliegue de exploración radioelectrónica y fuerza aerotransportadas, era supuestamente luchar contra el crimen trasnacional y prestar apoyo durante una crisis humanitaria. Dos argumentos que constantemente usa Washington para atacar al Gobierno venezolano.
Áreas amenazadas
La fuente más importante de recursos económicos para Venezuela es el petróleo y sus derivados, la mayor parte de su explotación se encuentra en el centro y sur del país, en lo que se ha denominado el yacimiento petrolero más grande del mundo, la faja petrolífera del Orinoco.
No obstante, esta faja cuenta con una gran desventaja geoestratégica: un rápido acceso marítimo, que por el delta del Orinoco permite la entrada y salida de materiales y medios navales, a su vez, este delta se encuentra muy próximo a Trinidad y Tobago y Guyana, ambos países muy cercanos políticamente a Reino Unido.
Por el Sur, la exclusividad de la conexión terrestre que existe entre Venezuela y Brasil es una espada de Damocles. Representa un acceso muy prolongado a una región que carece de objetivos estratégicos, con excepción obvia de la Central Hidroeléctrica del Guri, que ofrece una fácil defensa terrestre para Venezuela pero una sola vía comercial hacia el exterior, con facilidades para la obtención de inteligencia desde Brasil.
Por tanto, cuando pensamos en bloqueo naval debemos mirar al Norte de Venezuela. El frente más amplio y accesible que representa la segunda línea costera más extensa y la zona económica exclusiva más grande de la cuenca del Caribe. Además, este frente Norte es el asiento de los poderes públicos del país, posee los puertos más importantes y uno de los complejos refinadores más grandes del mundo, ubicado en la península de Paraguaná, lo cual lo hace el objetivo primario de una estrategia como esta.
Una de ellas, y es a la que más deben estarle dando vueltas los militares y políticos en Washington, es: ¿Vamos a impedir que un avión o barco ruso, chino, iraní o turco entre a Venezuela con alimentos y medicinas? Y de ser positiva la respuesta, surgiría una última y muy importante cuestión ¿Cómo lo harían? No es del todo fácil, verle la cara a la tercera guerra mundial ¿verdad?
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE SPUTNIK