En agosto de 2018, y en el marco de una causa judicial que investigaba presunto enriquecimiento ilícito, la Policía allanó las residencias de Fernández en Buenos Aires, en Río Gallegos, la capital de la provincia de Santa Cruz, y en El Calafate, ciudad turística del mismo territorio, al sur del país.
En efecto, San Martín escribió la carta desde Francia, donde se encontraba exiliado, y O'Higgins la recibió en Lima, donde pasó sus últimos años.
Tras el allanamiento, la carta quedó en manos del Archivo General de la Nación. En marzo de 2019, el juez Claudio Bonadio procesó a la expresidenta, alegando que había obtenido la carta ilegal".
El Dr Bonadío debería citar a declarar a Vladimir Putin, al traductor y al dueño de la casa de antigüedades de Nueva York, por la carta de San Martín a O'Higgins.
— Aníbal Fernández (@FernandezAnibal) April 25, 2019
También debería llamar a declarar a quien se la vendió. pic.twitter.com/YwpsMrhjEa
El derrotero de la carta había sido un misterio hasta ahora, cuando trascendió que el esperado libro escrito por Fernández contiene una inesperada revelación sobre el caso.
Fernández recordó que Putin "hizo detener el paso de nuestra comitiva y pidió a uno de sus colaboradores, que tenía una caja en sus manos, que se acercara".
"Y allí, ante mi sorpresa y traductor mediante, me dijo: 'Esto es para usted, presidenta'. Cuando abrí la caja y pude ver la carta original de San Martín a O'Higgins, casi me muero", recoge el libro.
"Lo miré y le pregunté: '¿Y esto? ¿De dónde lo sacaron?'. La respuesta no se hizo esperar y me sorprendió aún más: 'La mandamos a comprar para usted en Nueva York'", cuenta Fernández sobre la respuesta de Putin.
En el libro, Fernández señala que el presidente ruso logró impresionarla "y con creces". "¡Una carta original del libertador San Martín al libertador O'Higgins! ¡En la que, además, San Martín se lamenta por la ingratitud que recibieron ambos por los pueblos que liberaron!", exclama.
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"¡Mamita! Putin, 'chapeau'", celebra la expresidenta en ese pasaje del libro.