"Nuestros países hacen frente a las tareas para reforzar la cooperación en la esfera técnico-militar", dijo Putin en una sesión del Consejo de Cooperación Ruso-Turco de Alto Nivel que se celebra en Moscú.
El líder ruso subrayó que se trata sobre todo de los esfuerzos para "terminar la implementación del contrato sobre los suministros de sistemas antiaéreos S-400 Triumf", así como de otros proyectos que prevén suministros de la producción militar rusa a Turquía.
Por su parte el presidente de Turquía declaró que la compra de los sistemas antiaéreos rusos S-400 es un derecho soberano de Turquía.
"Si nos pusimos de acuerdo, firmamos un contrato, por supuesto, continuaremos avanzando, es nuestro derecho soberano, nuestra decisión, nadie podrá exigir que lo rechacemos", afirmó el presidente turco al responder a una pregunta sobre la presión que EEUU ejerce sobre Ankara en esta cuestión.
Erdogan subrayó que Turquía, tanto como otros países independientes, tomará las decisiones basándose en sus intereses nacionales al agregar que cuando terceras partes hacen cualquier paso, no preguntan a Ankara.
Asimismo Rusia y Turquía podrían desarrollar conjuntamente material bélico con tecnologías avanzadas, declaró el presidente ruso, Vladímir Putin.
"Existe la posibilidad de que lleguemos [con Turquía] a un desarrollo conjunto y la producción conjunta del material bélico con tecnología de punta", dijo Putin.
Señaló que Rusia y Turquía colaboran no solo en el sector técnico y militar sino en muchos otros.
Además, según Putin, los dos países tienen perspectivas en la cooperación en la industria química y siderúrgica.
En lo que se refiere al comercio entre Rusia y Turquía, Putin indicó que el levantamiento de las restricciones actuales en esta esfera podría contribuir a su ampliación.
Añadió que el lanzamiento de nuevos proyectos conjuntos en varios ámbitos económicos, como la industria, la metalurgia, la economía agrícola o el sector de altas tecnologías, contribuirá también a la intensificación de la cooperación inversionista entre los dos Estados.
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El presidente señaló también que en 2018 el intercambio comercial bilateral aumentó en casi un 16% y superó los 25.000 millones de dólares, mientras que el volumen de las inversiones mutuas se acerca a 20.000 millones de dólares.
Según el presidente ruso, el primer bloque de la central se pondrá en explotación en 2023 para celebrar los cien años desde el establecimiento de la República de Turquía.
Además, Putin afirmó que Rusia hará todo lo posible para que los inversores extranjeros se sientan cómodos y seguros.
"Quiero subrayar que nosotros en Rusia hacemos y vamos a hacer todo lo necesario para que las empresas extranjeras, incluidas las turcas, se sientan lo más cómodas y seguras posible en el mercado ruso y no se sometan a demasiadas cargas administrativas", afirmó.
Por su parte el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, expresó la esperanza de que su país y Rusia dentro de poco empiecen a efectuar pagos mutuos en sus monedas nacionales, protegiéndose de este modo de las manipulaciones en los mercados de divisas.
"Yo quisiera que logremos lo más rápido posible efectuar intercambios comerciales en nuestras monedas nacionales y tener con eso la posibilidad de protegernos de las manipulaciones en los mercados de divisas", dijo.
"La central atómica de Akkuyu, el Turk Stream, el Blue Stream (Corriente Azul) son proyectos estratégicos a largo plazo", subrayó agregando que la tarea inmediata estriba en concluir la construcción de la parte continental del Turk Stream hasta finales de 2019.
El proyecto Turk Stream incluye la construcción de dos tuberías con una capacidad total de 31.500 millones de metros cúbicos anuales de Rusia a Turquía, a través del fondo del mar Negro.
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El Turk Stream es un complemento del gasoducto Blue Stream tendido por el fondo del mar Negro, que empezó a explotarse en 2003.
Moscú y Ankara firmaron en 2010 un acuerdo intergubernamental para construir en la provincia sureña turca de Mersin la planta nuclear de Akkuyu con cuatro reactores de 1.200 megavatios cada uno.
Ankara espera que el primer reactor de la central se ponga en servicio en 2023.
Situación en Siria
Además, Vladímir Putin declaró que Rusia y Turquía, en calidad de garantes del proceso de Astaná, se esfuerzan en mejorar la situación en Siria mediante la formación de una Comisión Constituyente en el país árabe.
Putin recordó que en la ciudad turca de Antalya recientemente tuvo lugar una reunión del Grupo Conjunto de Planificación Estratégica ruso-turco, en la que se debatió la situación en Siria.
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La decisión de crear una Comisión Constituyente siria, que estará compuesta por representantes de la sociedad civil, el Gobierno sirio y la oposición, fue el principal resultado del Congreso de Diálogo Nacional Sirio, que se llevó a cabo en enero de 2018 en la ciudad rusa de Sochi.