"Ahora fallece una de cada 17 o 18 personas, mientras que antes uno de cada 42 o 50", dijo Hoedt en una rueda de prensa en Moscú.
El representante de MSF destacó que esta estadística abarca solo las muertes en el Mediterráneo al agregar que la mayoría de los refugiados fallecen incluso antes de llegar a Libia, el habitual punto de tránsito para los migrantes africanos que pretenden cruzar el mar rumbo a Europa.
A pesar de que el riesgo es muy alto, los emigrantes continúan intentando alcanzar Europa desde las costas del norte de África, muchos de ellos llevan meses esperando el momento oportuno.
El representante de MSF señaló que la mayoría de los migrantes africanos provienen en particular de Nigeria, Malí, Senegal, Costa de Marfil, así como Somalia, Eritrea y Etiopía.