La oficina de Bachelet pide al Gobierno de Colombia y ELN restablecer diálogos de paz

"La Alta Comisionada hace un llamado al Gobierno y al Ejército de Liberación Nacional" para que acuerden "un cese al fuego bilateral que permita construir confianza para la reanudación del diálogo de paz", indicó la ONU Derechos Humanos en Colombia a través de su cuenta de la red social Twitter.

​El anuncio fue hecho por el representante en Colombia de la Oficina de la Alta Comisionada, Alberto Brunori, durante la presentación en Bogotá del Informe Anual de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos sobre la situación en Colombia.

La guerrilla del ELN y el Gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018) tuvieron diálogos públicos de paz desde febrero de 2017, pero los mismos fueron suspendidos por el presidente Iván Duque tras asumir como presidente el pasado 7 de agosto, cuando puso como condición a esa guerrilla que entregara a todos los secuestrados que tenía en su poder y cesara los ataques a la infraestructura del país para retomar las conversaciones.

Los diálogos se realizaron primero en Quito, pero en mayo de 2018 fueron trasladados a La Habana, donde aún permanecen los diez miembros de la comisión negociadora de paz de ese grupo rebelde, luego de que el Gobierno de Duque canceló de manera unilateral los diálogos tras el atentado con coche bomba el pasado 17 de enero a la Escuela de Cadetes General Santander, en Bogotá.

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El hecho, que dejó 22 estudiantes muertos y 66 mas heridos, fue atribuido por esa misma guerrilla, lo que a su vez generó que el gobierno ordenara que fueran reactivadas las órdenes de captura en contra de los jefes negociadores de paz del ELN y pidió a Interpol que emitiera circulares rojas en su contra para que fueran extraditados desde Cuba.

Sin embargo, La Habana se ha negado a esa petición y sostiene que respetará el protocolo de negociaciones de paz aplicado en caso de ruptura de los diálogos.

El protocolo, firmado por el ELN con el anterior gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018), señala, entre otras cosas, que en caso de una ruptura de los diálogos de paz el Gobierno colombiano debe permitir el retorno al país de los delegados del ELN, para lo cual las partes contarán con dos semanas para planear dicho regreso, cuyo procedimiento será redactado en conjunto con los países garantes.

La administración de Duque sostiene que desconoce el protocolo de ruptura de negociaciones porque, entre otras cosas, no se ha reunido con los delegados del ELN y porque no ha firmado ningún protocolo.