El templo solicitó a Hiroshi Ishiguro, el profesor de la universidad, que construyese un robot que pudiese predicar las enseñanzas budistas de una manera fácil y entendible para ayudar a las almas perdidas a encontrar la paz interior, según el portal Asahi. El proyecto costó 909.000 dólares.
El androide se llama Mindar y está programado para repartir sermones del Sutra del Corazón en japonés, un texto budista muy popular.
Desde el templo recuerdan que Kannon tiende a transformarse y a adoptar formas distintas para ayudar a la gente. Así que en esta ocasión "Kannon se ha convertido en un androide", señalan. De esta forma, Kannon pesa 60 kilos, mide 195 centímetros, tiene una cámara en el ojo izquierdo y rebosa cables por los cuatro costados.
"Esperamos que el androide Kannon ayude a que las enseñanzas budistas lleguen al corazón de la gente de hoy", añade Tensho Goto, uno de los sacerdotes del templo de Kodaiji, construido en el siglo XVI por la esposa de Toyotomi Hideyoshi, uno de los unificadores de Japón.