El índice de riesgo alcanzó los 783 puntos básicos, de acuerdo al portal Infobae, en un contexto de elevada inflación y una economía que sigue en recesión.
La moneda argentina se depreció un 4,5% frente al dólar, con lo que la divisa estadounidense llegó al récord de 43,5 pesos, frente a 41,6 de la jornada anterior.
El Banco Central no pudo frenar la caída del peso pese a que intervino en el mercado de dólar a futuro.
La entidad monetaria también volvió a elevar por cuarta jornada consecutiva la tasa de interés, al 51,8% en promedio, de las Letras de Liquidez que ofrece a los bancos a siete días de plazo.
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La incertidumbre financiera impactó en varios mercados emergentes, pero la caída afectó en especial los activos argentinos en el contexto de una recesión y una inflación que en enero llegó al 49,3% interanual.
Esta nueva corrida cambiaria, sin embargo, no es motivo de preocupación para el Gobierno de Mauricio Macri, según afirmó el ministro de Producción, Dante Sica.
"Tuvimos dos días feriados, algunos movimientos externos, no encontramos todavía causas de preocupación con respecto al tipo de cambio", señaló el ministro en declaraciones a la prensa.
El Fondo Monetario Internacional firmó el año pasado un acuerdo con el Gobierno por 56.300 millones de dólares en medio de una corrida cambiaria que hizo que la moneda local perdiera 88,4% de su valor con respecto al dólar en apenas cinco meses, entre mayo y septiembre de ese año.
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En ese momento, el dólar alcanzó un máximo al cotizarse a 42,1 unidades para la venta, valor que por primera vez ha sido superado este 7 de marzo.
