"Las actividades alarmantes de los líderes militares de Corea del Sur y EEUU constituyen una burda violación de los puntos de la declaración conjunta de la RPDC y EEUU y de la declaración intercoreana, que prometieron acabar con las relaciones hostiles y mitigar las tensiones militares", dice el despacho.
Según el texto, esos ejercicios militares son para Pyongyang "un golpe contra los deseos y las aspiraciones de toda la nación [la RPDC] y la comunidad internacional que desean la paz y la estabilidad en la península de Corea".
El presidente estadounidense, Donald Trump, justificó la cancelación de las maniobras por el interés de ahorrar millones de dólares, así como de mejorar las relaciones con Corea del Norte.
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Sin embargo, ya al día siguiente Seúl y Washington realizaron nuevos ejercicios militares, bautizados como Dong Maeng, en vez de los anteriores.
Las maniobras Foal Eagle se realizan en Corea del Sur desde 1961.
Los días 27 y 28 de febrero se celebró en Hanói, capital de Vietnam, la segunda reunión entre Trump y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un.
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La cumbre terminó antes de lo programado y sin acuerdo, aunque las partes quedaron en mantener más reuniones en el futuro.
Pyongyang ha expresado en repetidas ocasiones su preocupación por la seguridad a causa de los ejercicios conjuntos de EEUU y Corea del Sur.