"Países de la Unión Europea deben recuperar etiqueta y ética diplomática en sus relaciones con el Gobierno constitucional de Venezuela, presidido x (por) el Presidente Nicolás Maduro, el respeto a la Carta de la ONU y el Derecho Internacional es esencial en la comunidad internacional", escribió la vicepresidenta en la red social Twitter, el 6 de marzo.
Horas antes, el Gobierno venezolano declaró persona no grata al embajador de Alemania, Daniel Kriener, a quien acusó de interferir en los asuntos internos de la nación caribeña.
El Ejecutivo le dio 48 horas al embajador alemán para abandonar el país.
Países dla Unión Europea deben recuperar etiqueta y ética diplomática en sus relaciones con el gobierno constitucional de Venezuela, presidido x el Pdte @NicolasMaduro El respeto a la Carta de la ONU y el Derecho Internacional es esencial en la comunidad internacional! https://t.co/DNVcTDM3Hp
— Delcy Rodríguez (@DrodriguezVen) 6 марта 2019 г.
Kriener fue uno de los embajadores de los países europeos que recibieron al diputado Juan Guaidó, autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, cuando arribó el pasado 4 de marzo al aeropuerto internacional Simón Bolívar, en el estado Vargas (norte), tras realizar una gira por naciones suramericanas.
Además, Alemania se encuentra entre los países que ha reconocido a Guaidó como "presidente encargado" de Venezuela.
El 23 de enero, el diputado se autoproclamó "presidente encargado" de Venezuela, apelando a un artículo de la Constitución que prevé la figura en caso de que exista un vacío de poder, pero no bajo el argumento de "usurpación del cargo", como alegó Guaidó.
El presidente Maduro, quien asumió su segundo mandato el 10 de enero tras unas elecciones que la oposición boicoteó, calificó la declaración de Guaidó de intento de golpe de Estado y responsabilizó a Estados Unidos de haberlo orquestado.
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Guaidó fue reconocido de inmediato por Colombia y EEUU, a los que se sumaron unos 50 países, mientras que Rusia, China, Cuba, Bolivia, Irán y Turquía, entre otros, mantienen el apoyo al Gobierno de Maduro.
México y Uruguay, por su parte, se niegan a reconocer a Guaidó, se declaran neutrales y proponen un diálogo entre las partes para superar la crisis.
