"Nos hemos puesto de acuerdo en cómo se tomarán las decisiones, horario de reuniones, política de comunicación y divulgación, la naturaleza de los acuerdos alcanzados y aspectos de logística", precisa la nota, publicada por el portal gubernamental 19Digital tras la tercera ronda de conversaciones.
"De la elaboración de reglas claras y definidas de antemano, dependerá en gran medida el buen funcionamiento y los resultados de la negociación", enfatiza el pronunciamiento del Gobierno sandinista.
A su vez, la ACJD advirtió en su web oficial que "aún se mantienen temas por concretar y que deben estar claros para entrar luego a la definición y discusión de la Agenda".
"Nicaragua se merece una negociación profesional y responsable que responda a la grave crisis que atravesamos y que sus acuerdos se cumplan. Esta es una negociación muy compleja", reconoce la Alianza, integrada por estudiantes, campesinos, académicos, religiosos y empresarios.
Por la oposición participan los empresarios José Adán Aguerri, Mario Arana y Juan Sebastián Chamorro, el catedrático Carlos Tunnermann, el político José Pallais y el estudiante Max Jerez.
Nicaragua vive una crisis política y social desde mediados de abril pasado, cuando una reforma al sistema del Seguro Social desató violentas protestas contra el Gobierno del presidente Daniel Ortega, acompañadas por actos que el sandinismo tildó de "terroristas".
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Entonces fue convocado un diálogo nacional auspiciado por la Iglesia Católica, que suspendió las conversaciones en junio pasado, en medio de acusaciones y la falta de consenso entre ambas partes.
El pasado 17 de febrero, el Gobierno acordó con líderes del empresariado local iniciar una negociación enfocada en el bien común de esa nación centroamericana, con el auspicio de la Iglesia Católica.