"Consideramos como tarea prioritaria empezar sin demora alguna la evacuación de los habitantes [del campo de Rukban] y su eliminación", dijo Zajárova en una rueda de prensa.
Rukban está situada en la zona de Al Tanaf, controlada por las tropas estadounidenses.
El pasado 16 de febrero, el Gobierno sirio decidió crear con la ayuda de Rusia dos corredores humanitarios para que los refugiados sirios de Rukban puedan trasladarse de forma voluntaria a los lugares de residencia que deseen y anunció que los puestos de control en las localidades de Jleb y Jabal al Ghurab ya empezaron a funcionar.
Más tarde, el jefe del Centro ruso para la reconciliación en Siria, teniente general Serguéi Solomatin, comunicó que los extremistas del movimiento Mahavir As-Saura que operan en la zona y cuentan con el apoyo de EEUU, obstruyeron las salidas del campamento, erigiendo una colina de tierra.
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Por su parte, el portavoz de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), Jens Laerke, afirmó que la situación en Rukban es grave porque los refugiados permanecen en el territorio del campamento a pesar de la apertura de los puestos de control.
El Frente al Nusra y su influencia en Siria
La portavoz también denunció que los terroristas del Frente al Nusra (proscrito en Rusia y otros países) pretenden ampliar las zonas de su influencia en Siria y apoderarse de la provincia siria de Idlib, declaró este jueves la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova.
"Los terroristas pretenden ampliar sus zonas de influencia y establecer el control total en Idlib", dijo.
La gobernación de Idlib, en el noroeste de Siria, fue ocupada en 2015 por varios grupos terroristas, entre ellos el Frente al Nusra, también conocido como Hayat Tahrir al Sham, prohibido en Rusia.
En virtud de los pactos entre las facciones insurgentes y Damasco, se fueron trasladando a Idlib los grupos que se negaron a abandonar la lucha armada durante las operaciones antiterroristas de Alepo, Homs, Guta Oriental, Deraa y Al Quneitra.
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En 2017, Idlib pasó a integrar una zona de distensión patrocinada por Turquía.
Idlib es la última provincia siria controlada por terroristas y agrupaciones ilegales armadas.