El arrestado, Arafat Irfaiya, de 29 años, recreó el asesinato en la escena del crimen, ocurrido en el Bosque de Jerusalén, y mostró a los investigadores dónde encontró a Ansbacher, de 19 años.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y su esposa, Sara, visitaron hoy a la familia Ansbacher en el asentamiento de Tekoa, en el territorio palestino ocupado de Cisjordania, e informaron a sus familiares sobre los avances en la investigación.
La policía encontró signos de lucha en la escena del crimen.
A pesar de que este relato parece responder más a un delito común que a un ataque terrorista, el Shin Bet afirmó el 10 de febrero que se inclina por pensar que el asesinato tuvo “motivación política” y que se trata, entonces de “un ataque terrorista”.
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El cadáver de Ansbacher se halló desnudo con puñaladas en el pecho en la zona de Ein Yael, al suroeste de Jerusalén, el 7 de febrero.
Irfaiya fue arrestado el 9 de febrero en una operación conjunta del Ejército israelí, el Shin Bet y la unidad antiterrorista de la Policía de Fronteras cerca de Ramala.
El sospechoso tiene antecedentes penales, ya que en 2009 fue arrestado por posesión de un cuchillo y encarcelado durante tres meses.
En 2017 Irfaiya fue detenido por entrar ilegalmente en Israel y por llevar un cuchillo y estuvo cinco meses en prisión.
Según fuentes de seguridad citadas por el diario “Haaretz”, el palestino está afiliado al movimiento islamista Hamás, que no ha reivindicado el asesinato ni se ha pronunciado al respecto.
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El Shin Bet también reveló que, durante la extensa operación que llevaron a cabo las fuerzas de seguridad para localizar al sospechoso, éste se escondió en una mezquita y luego en un edificio abandonado en Ramala, donde fue detenido con el cuchillo que usó para asesinar a la joven.
El 9 de febrero por la noche, las fuerzas israelíes se desplazaron a casa del arrestado, que aún no ha podido ver a un abogado.
