A partir de febrero de 2019, el Gobierno japonés intentará colarse en las webcams y los routers de sus ciudadanos, publicó la cadena NHK World. Utilizarán contraseñas comunes y diccionarios de contraseñas que irán probando en 200 millones de dispositivos.
Entre los argumentos que la entidad esgrimió para justificar un programa que puede violar el derecho a la privacidad de millones de usuarios y dejar aún más vulnerables un montón de datos, está la necesidad de mejorar la ciberseguridad antes de las Olimpiadas de 2020 de Tokyo. Las autoridades del INTIC aseguraron que los datos no se filtrarán.
Internet de las cosas: la comodidad y los beneficios tienen sus riesgos
El programa se instaurará con el objetivo de luchar contra la creciente amenaza de las intrusiones de ciberseguridad en millones de dispositivos, especialmente en el ámbito de la internet de las cosas, según se explica la página web de gadgets y tecnología Xakata.
Según datos del INTIC publicados por NHK World, en 2017 el 54% de los ataques que se detectaron estaban dirigidos a este tipo de dispositivos.