Sputnik conversó con Roberto Santana, profesor de la Universidad del Estado de Río de Janeiro.
Según afirmó el experto, la crisis política actual en Venezuela está directamente vinculada con el primer mandato de Maduro, que comenzó en el 2013. En cuanto a su triunfo, supuso "la victoria del chavismo" en el país latinoamericano.
"El hecho es que en el 2015, la oposición ganó las elecciones en la Asamblea Legislativa. Al parecer, la oposición reconoce los resultados cuando gana, pero no quiere reconocerlos si pierde", afirmó.
Santana subrayó que la crisis económica en el país se debe a las sanciones impuestas por la Administración Trump, que "sofocaron" la economía venezolana y también influyeron en la situación política interna.
"En Venezuela, tiene lugar un bloqueo económico impuesto por Donald Trump el año pasado", señaló el experto.
El politólogo brasileño agregó que, pese a que Maduro no recibió el apoyo de la Asamblea Nacional, sigue siendo respaldado por otras ramas del Gobierno.
Más: "La Asamblea Nacional asume la representación cómo único Poder Legítimo de Venezuela"
"En su mayoría, son chavistas", recordó Santana. Y en lo que respecta a la oposición, perdió el apoyo de ciertos sectores sociales —en particular, la clase media— por no participar en los procesos electorales.
El 4 de enero, 13 de los 14 países del Grupo de Lima aprobaron una declaración señalando que desconocen el nuevo mandato de Maduro por considerar que es producto de unas elecciones "ilegítimas", y acordaron "reevaluar" el estado de las relaciones diplomáticas con Caracas.
Por su parte, la UE, EEUU y la OEA tampoco reconocieron los resultados de las presidenciales y las calificaron de "ilegítimas".
"La UE lamenta profundamente que el presidente Maduro emprenda hoy un nuevo mandato sobre la base de elecciones no democráticas", indicó la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
Sin embargo, Maduro juró el cargo ante el Tribunal Supremo de Justicia pese a las críticas de muchos Gobiernos en ambos lados del Atlántico.
De acuerdo con el politólogo, la situación actual en Venezuela podría dar lugar a un aislamiento diplomático del país a nivel regional.
"Como resultado, el Gobierno de Maduro va a apostar —y ya lo ha estado haciendo desde el año pasado— por el fortalecimiento de las relaciones con Rusia, China, la India, Turquía; en otras palabras, reorientar su economía hacia el mercado asiático, que se convirtió en el centro de la economía mundial en las últimas décadas" en vez de cooperar con los países de América y Europa, señaló Santana.
El experto consideró también que esta estrategia podría crear nuevas vías de desarrollo económico.
Al mismo tiempo, la presión sobre Venezuela podría ser aliviada, ya que, en particular, países como Brasil o Argentina, pierden dinero por reducir la cooperación con Caracas.
Más del asunto: "Después del 10 de enero Maduro debe conducir a Venezuela al diálogo"
"Los pueblos de América Latina no están interesados en que sus gobiernos entren en conflicto. En vez de esto, están interesados en una mayor integración económica, social, diplomática y cultural de Latinoamérica, ya que beneficiaría a todos", concluyó.