El Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil pidió a las misiones del país en la ONU "informar mediante nota, respectivamente al secretario general de las Naciones Unidas y al director general de la Organización Internacional de Migración, además de a otros interlocutores considerados relevantes, que Brasil se disocia del Pacto Global para una Migración Segura, Ordenada y Regular", publicó el medio británico.
En las últimas semanas, antes de asumir como presidente, Jair Bolsonaro había expresado su voluntad de que Brasil dejara el pacto.
En la misma línea se había expresado el ahora ministro de Exteriores, Ernesto Araújo.
Araújo afirmó en la red social Twitter que el pacto impulsado por la ONU es un "instrumento inadecuado para tratar con el problema (migratorio)", defendiendo que la inmigración no debe tratarse como una cuestión global, sino en función de la realidad y soberanía de cada país.
Además, subrayó que el pacto "no autoriza migración indiscriminada", sino que busca servir de marco referencial, sin interferencia en la política migratoria de cada país.
El nuevo Gobierno brasileño es crítico con el multilateralismo y con organismos como la ONU.
Bolsonaro cuestionó anteriormente otros pactos globales, como el Acuerdo de París contra el calentamiento global, y aunque durante la campaña electoral llegó a prometer la salida de Brasil, más recientemente parece haber reconsiderado su postura.