"Con la descarada injerencia contenida en su declaración del 4 de enero, orientada a cumplir los objetivos del imperio, el Grupo de Lima liderado por Estados Unidos ha realizado probablemente uno de los actos más vergonzosos de servidumbre política abyecta al Tío Sam cometido por las oligarquías de la región", critica el secretario de la organización y profesor en la universidad de Middlesex, Francisco Domínguez.
"Debe ser rechazada de manera inequívoca y diametralmente contrarrestada", insta el académico y activista latinoamericano.
Domínguez acusa al Grupo de Lima de consentir que Estados Unidos "dirija, guíe y determine" su política.
"El Grupo de Lima representa la extrema derecha de [Latinoamérica] (…) que procura erradicar todas las formas de política progresista en la región", denuncia el secretario de la campaña británica de solidaridad con Venezuela.
Estas medidas punitivas "están en línea", según la VSC, con el objetivo de Washington de "generar la máxima inestabilidad a fin de crear las condiciones para el 'cambio de régimen'" en Caracas.
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La VSC insta a sus socios y simpatizantes a movilizarse en contra de las "sanciones ilícitas" enfocadas en Venezuela.
