La aurora boreal
La ruta del viaje de invierno incluye las ciudades de Moscú, Apatiti, Kírovsk, Múrmansk y San Petersburgo. El principal objetivo del viaje es cazar la aurora boreal, increíblemente bello fenómeno natural de brillo o luminiscencia que se presenta en el cielo nocturno de las zonas polares.
"La búsqueda de la aurora boreal comienza en Kírovsk y continúa en Múrmansk. Sin embargo, en las ciudades es muy difícil verla debido a la iluminación eléctrica. Por lo general, para ver las luces del norte en toda su belleza, es necesario salir de la ciudad, preferiblemente lejos de la luz artificial", explica Yulia que habla español y trabaja con los turistas españoles y latinoamericanos, entre otros.

"Pero hay áreas más naturales, lejos de la ciudad, donde está el bosque nevado, estás tú y el cielo arriba. En lugares tan desérticos se hacen las fotos más pintorescas", agrega Yulia.
Sin embargo, incluso fuera de las ciudades grandes, no resulta tan fácil cazar la aurora boreal. A pesar de que existen ciertos pronósticos, es imposible garantizar al 100% que se logre verla.
Según la guía, siempre hay varios autobuses al lado y los turistas que están cansados pueden regresar al hotel, mientras que los observadores y fotógrafos más apasionados pueden quedarse hasta el final.
"La aurora boreal está en constante movimiento, se mueve de un lado del cielo para otro, cambia de brillo y colores, es muy emocionante verlo. Uno puede pasar toda la noche así", cuenta la joven.

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Otra parada del tren turístico está en Múrmansk, el puerto más al norte de Rusia, cubierto de nieve. Aquí, los amantes de la aventura pueden ver los perros huski rusos, probar la carne de ciervo y de oso, pescar en el hielo o montar en toboganes de nieve.
"También les recomendamos que compren suelas antideslizantes con dientes para el hielo y calentadores especiales para manos y pies".
Además, es importante llevar baterías adicionales para teléfonos y cámaras, ya que se descargan mucho más rápido en el frío. Y, por supuesto, hay que llevar un lápiz labial higiénico y crema nutritiva para manos y cara.
"De todas maneras, nuestro equipo trata de tener en cuenta todos los detalles y cuidar la comodidad de nuestros turistas. Hay un médico en el tren, los guías siempre están con los turistas y nuestro pianista viaja con nosotros, así que nunca nos aburrimos", asegura la guía.

Transiberiano
Además del norte de Rusia, Yulia se especializa en el mítico tren Transiberiano, viaje de ensueño de muchos rusos y extranjeros. No obstante, la interlocutora de la agencia recomienda hacer el viaje por las ciudades de Siberia en verano —de junio a agosto—.

Pero si uno quiere ver la ruta del Transiberiano en invierno, según Yulia, la mejor opción es ir al lago Baikal.

Los turistas que viajan en el Transiberiano tanto en verano como en invierno a menudo confiesan que no se imaginaban que Rusia fuera tan grande.
"De Moscú a Ulán-Udé viajamos casi 6.000 kilómetros en tren. Ni siquiera nosotros, los rusos, siempre nos damos cuenta de lo grande que es nuestro país".
Además, según Yulia, el Transiberiano rompe con los estereotipos y disipa los mitos de los extranjeros sobre Siberia.
"Siberia les sorprende a muchos porque rompe los tópicos de que sea una tierra gris, triste y casi desértica. ¡Esto no tiene nada que ver con la realidad! Sus ciudades son hermosas e interesantes, ni hablar de la perla de Siberia: el lago Baikal, un lugar especial de poder y energía".
"El error más común de los turistas que viajan en el Transiberiano en verano es la gran cantidad de ropa caliente que llevan porque piensan que el clima es frío en Siberia. Claro, en invierno la temperatura baja a —40 grados, pero en verano puede llegar a +35. Por lo tanto, antes de salir de viaje, es mejor ver el pronóstico del tiempo", aconseja Yulia.
En cuanto a los precios de estos exóticos viajes por Rusia, el de invierno dura 10 días y cuesta a partir de 3.500 euros, dependiendo de la categoría del compartimento en el tren. El viaje en el Transiberiano (Rusia — Mongolia — China) es de 16 días y el precio es a partir de 5.000 euros y también varía según la clase del compartimento.
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