Treinta supuestos terroristas fueron eliminados en El Cairo y la periferia de la capital y los restantes 10, cerca de El Arish, norte de la península del Sinaí.
El comunicado no especifica si estos radicales guardan alguna relación con el ataque del 28 de diciembre contra un autobús con turistas cerca de las pirámides de Guiza.
La detonación de una bomba de control remoto adosada a una pared de la calle Al Mariuteya causó cuatro muertos y 12 heridos.
Tres de las cuatros víctimas mortales y 10 de los 12 heridos son nacionales de Vietnam.
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La fiscalía egipcia lleva a cabo una investigación a raíz del atentado.
