En las imágenes se puede ver cómo el BREM civil remolca un avión Il-62 en condiciones climáticas severas. No obstante, este no es el límite de sus capacidades, puesto que tiene una tracción de hasta 120 toneladas.
Además, la máquina puede establecer una ruta de escape en cualquier superficie, lo cual contribuye a la velocidad y eficiencia de las operaciones de evacuación de las aeronaves.
El director industrial de la corporación estatal Rostec, Serguéi Abramov, destacó que este es un ejemplo de una exitosa conversión de una máquina militar en el ámbito civil y que el BREM-1 civil podría tener un importante potencial de exportación.
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Dicho vehículo tiene un peso de 41 toneladas y está equipado con una grúa giratoria de giro total con una capacidad de carga máxima de 12 toneladas. También tiene una plataforma de carga para acomodar contenedores con herramientas, accesorios y piezas de repuesto.
La tripulación del tanque remolcador está compuesta por dos especialistas de Domodédovo que ya han recibido el entrenamiento necesario.
Antes de la entrega, el vehículo fue desmilitarizado: se le retiraron las ametralladoras, las granadas de humo, los sistemas de comunicación del Ejército y se lo pintó de naranja, color utilizado por los equipos de tierra en los aeropuertos.
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