"A nuestra compatriota la obligaron de hecho a poner su firma debajo de las absurdas acusaciones, tras someterla a unas condiciones insoportables y amenazándola con prolongadas condenas", dijo la portavoz.
La diplomática precisó que a Bútina "la pasaron a un bloque de la cárcel destinado a criminales peligrosos, no la dejaban salir de la celda 22 horas diarias" y la mujer ni siquiera contaba con asistencia médica satisfactoria.
María Bútina, graduada en relaciones internacionales en una universidad estadounidense, fue arrestada el 15 de julio en Washington por supuesta conspiración para actuar como agente extranjero sin registrarse ante el Departamento de Justicia de EEUU.
La jueza estadounidense Tanya Chutkan aceptó el 13 de diciembre la declaración de culpabilidad de Bútina referente a los cargos de conspiración con varios individuos contra EEUU.
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La rusa afirmó además que no fue obligada a aceptar el alegato de culpabilidad.
Rusia reiteró que las acusaciones contra Bútina eran totalmente infundadas y la acusada previamente se había declarado inocente de los cargos de conspiración y de actuar como agente extranjera, insistiendo en que no cometió delito alguno.
El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso llama a la inmediata liberación de la ciudadana rusa.
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