Los líderes de la UE expresaron el 14 de diciembre "su más profunda preocupación" por las presuntas "violaciones del Derecho internacional por parte de Rusia" y afirmaron que "no hay ninguna justificación para el uso de la fuerza militar por parte de Rusia" que a finales de noviembre apresó tres buques ucranianos con sendas tripulaciones por haber violado su frontera en el mar Negro.
"Es una evaluación que parece venir de un universo paralelo, son declaraciones dirigidas no tanto a Rusia ni tampoco a Ucrania, sino a los ciudadanos de los países miembros de la UE", dijo Bobkov a Sputnik.
"Los ciudadanos de la UE no tienen más remedio que dar por ciertas estas falsedades por no disponer de fuentes alternativas de la información", comentó el diputado.
El pasado 25 de noviembre, tres barcos de la Armada ucraniana violaron la frontera rusa al entrar en una zona provisionalmente cerrada del mar Negro y avanzaron hacia el estrecho de Kerch, que une los mares Negro y de Azov.
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El presidente de Rusia, Vladímir Putin, calificó el incidente de provocación, señaló que entre los tripulantes de los buques infractores se encontraban dos agentes de Seguridad, quienes de hecho estuvieron dirigiendo la operación y subrayó que los guardias fronterizos rusos estaban cumpliendo su deber profesional.
