Es la segunda vez en la historia que un objeto artificial, la sonda Voyager, sale de la heliosfera —una burbuja protectora formada por viento solar- y alcanza el espacio interestelar.
Según el astrónomo, es posible que se descubra nueva información sobre la sustancia interestelar, lo que contribuiría al avance de la ciencia.
La sonda lleva a bordo el llamado Disco de Oro, que contiene sonidos e imágenes que retratan la diversidad de la vida y la cultura en la Tierra, así como la localización de nuestro planeta. Se diseñó con el objetivo de dar a conocer la existencia de vida en la Tierra a una potencial forma de vida extraterrestre inteligente.
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"La posibilidad de que nuestro mensaje llegue a los extraterrestres es extremadamente pequeña. Es mucho más probable que este mensaje despierte más interés en nuestros descendientes que lo encuentren en internet y queden sorprendidos con lo ingenua y romántica que era nuestra generación", opinó Surdín.
La sonda se encuentra actualmente a una distancia de 18.000 millones de kilómetros del globo terráqueo. Según el científico, nadie sabe dónde podría encontrarse la civilización inteligente más cercana a nosotros.
Descubren un "sol 2.0" que podría tener una "Tierra 2.0" habitada https://t.co/BaVwVdWfa9 pic.twitter.com/q2LwsdxBGV
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 20 ноября 2018 г.
"Hasta ahora, solo hemos descubierto planetas aptos para la vida que están relativamente cerca de la Tierra. No obstante, entre millones de formas de vida que habitan nuestro planeta, solo hay una especie inteligente, pero está caminando al filo de la navaja y corre el riesgo de autodestruirse".
"Creo que la civilización más cercana está muy lejos de nosotros. Sin embargo, esto no significa que no podamos establecer contacto con ella e intercambiar conocimientos", concluyó el astrónomo.
Eso permitió a los científicos afirmar que la Voyager 2 se encuentra ahora en el espacio interestelar, pero ni la Voyager 1 ni la 2 han abandonado todavía el sistema solar.
La Voyager 1 se lanzó el 5 de septiembre de 1977 y la Voyager 2 el 20 de agosto del mismo año. Cada aparato lleva un mensaje para las civilizaciones extraterrestres, un Disco de Oro, con 115 fotos de la vida en la Tierra, grabaciones de sonidos de la naturaleza, música y saludos en 55 idiomas, y un plano del sistema solar.
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