"En el transcurso de este año me reuní en varias ocasiones con el canciller ruso Serguéi Lavrov, la última vez a fines de noviembre en Moscú, él siempre me aseguró que Rusia apoya nuestros esfuerzos, y debo decir que realmente Rusia ha cooperado con nosotros del modo más constructivo posible", dijo el también excanciller italiano.
"Quiero subrayar que ni Rusia ni Ucrania son partes del conflicto, sino mediadores que participan en el formato 5+2, por su parte el papel de la OSCE radica en coordinar todo el trabajo, en estas condiciones es necesario lograr que ambas partes, Chisinau y Tiraspol, cooperen entre sí", señaló Frattini.
No te lo pierdas: Todo lo que tienes que saber sobre Transnistria
El político italiano citó como ejemplo de la participación constructiva de Rusia el problema relacionado con el tránsito de vehículos matriculados en la república autoproclamada por el territorio de Moldavia y otros países de Europa, que halló solución a través de la creación de placas especiales con el llamado "estatus neutral", que permite el tránsito por Moldavia, Rumanía y otros países de la UE.
Frattini subrayó que el formato 5+2 es un ejemplo único de conversaciones efectivas en la política contemporánea internacional y expresó la esperanza de que en 2019, bajo la presidencia de Eslovaquia en la OSCE, se resuelvan conjuntamente los problemas pendientes.
"Estoy satisfecho con el método de nuestro trabajo y estoy convencido de que Eslovaquia continuará avanzando en esta dirección", concluyó.
Transnistria, donde los rusos y los ucranianos constituyen el 60% de la población, luchó por separarse de Moldavia desde antes de la desintegración de la Unión Soviética, al temer que el auge del nacionalismo empujara a los moldavos a unirse a Rumanía.
Continúa el 'deshielo' entre Transnistria y Moldavia https://t.co/WRwZ7hSL8P
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 27 ноября 2017 г.
Chisinau perdió el control sobre los territorios en la orilla izquierda del Dniéster en 1992 tras un intento frustrado de resolver el problema por la fuerza.