Episkopos destaca que el sistema termoacústico ruso de inteligencia Penitsilin es capaz de acabar con la artillería pesada de EEUU y enumera una serie de razones que confirma esta suposición.
Hoy en día, los radares estadounidenses experimentan ciertas dificultades a la hora de detectar proyectiles pequeños como los que suelen ser disparados por los morteros. Además, estas armas de EEUU son susceptibles a la detección y a las contramedidas electrónicas que pueden ser aplicadas en su contra.
El Penitsilin, según Episkopos, no tiene estos problemas.
"Dado que el sistema ruso no depende de las ondas electromagnéticas como otras tecnologías de radar, los militares rusos señalan que es indetectable y como consecuencia la artillería enemiga es incapaz de contrarrestarle", recalca Episkopos.
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Además, el sistema utiliza cuatro localizadores de sonido acústico-térmicos 1B76, una enorme plataforma de estabilización y un módulo óptico-electrónico que le permite procesar el ruido y la energía cinética.
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Al tomar en cuenta estas y otras capacidades, Episkopos concluye que el Penitsilin cuenta con "ventajas indiscutibles para un sistema de reconocimiento de artillería".
La información acerca de este sistema apareció por primera vez en 2017. El servicio de prensa de la empresa Roselectronica, que forma parte de Rostec, comunicó que la producción en serie del nuevo sistema empezará en 2019.
