El equipo forense dijo que "lamentablemente discrepa profundamente con una parte importante de las formulaciones del ámbito forense contenidas en la Recomendación 15VG/2018 presentada por la CNDH" el miércoles pasado, dice la respuesta de los peritos que colaboran en el caso a pedido de las familias de los jóvenes desparecidos.
Además no están de acuerdo con una parte importante de la recomendación del ombudsman federal porque interpreta y emite conclusiones en relación con ese basurero y restos óseos calcinados que "supuestamente fueron recuperados de una bolsa del Río San Juan", que atraviesa por ese municipio, según la llamada "verdad histórica" de la Procuraduría General de República.
El EAAF invita a los autores del texto de la CNDH a abrir una mesa técnica forense conjunta en la que puedan discutir a profundidad cada una de las graves discrepancias encontradas entre los resultados del los forenses argentinos y aquellos presentados por CNDH el 28 de noviembre.
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Los restos calcinados fueron enviados a un laboratorio forense en Innsbruck, Austria, que solo pudo identificar en análisis de ADN a uno de los desaparecidos, que habían sido detenidos por policías municipales de Iguala, Guerrero.
Cerca de la medianoche del 26 de septiembre de 2014 y la madrugada siguiente, cinco autobuses con un centenar de jóvenes que viajaban a la capital a una manifestación fueron atacado a balazos en distintos puntos, con un saldo de siete muertos unos 25 heridos.
Los policías confesaron que entregaron a los detenidos al grupo narcotraficante Guerreros Unidos, cuyos integrantes declaración a las autoridades que los asesinaron a todos, quemaron sus cuerpos en una pira y lanzaron sus restos al río.
Discrepancias de fondo
"Si bien se estableció la presencia de restos humanos de un número mínimo de 19 individuos, no se pudo establecer con certeza que alguno de los miles de restos encontrados correspondiera a los estudiantes normalistas", señala la réplica de los forenses.
Además, los restos que fueron enviados al laboratorio de genética de la Universidad de Innsbruck, fueron las piezas menos afectadas y con alguna posibilidad de recuperar material genético de las mismas.
El equipo forense argentino estima "particularmente grave, la reinterpretación que realiza la CNDH de los resultados genéticos de ese laboratorio austriaco, acerca del estudiante desaparecido Jhosivani Guerrero de la Cruz, que a diferencia de Alejandro Mora, plenamente identificado, es un resultado que no alcanza un umbral aceptable científicamente" para ser considerado como una identificación completa.
En síntesis, por el momento "no hay ninguna identificación de restos de los 43 estudiantes desaparecidos confirmada" en lo que se halló en ese basurero, agregó el equipo.
Los análisis de imágenes satelitales de años anteriores y posteriores al 26 de septiembre del 2014 en la zona sobre la que se encontraron la mayor concentración de restos humanos y animales "revelan que ha habido múltiples eventos de fuego a lo largo de varios años precisamente en esa zona del basurero", dice el informe pericial.
Sin embargo, hasta la fecha no se ha encontrado evidencia especifica que pudiera ligar esos eventos en particular sobre aquella noche.