Los sistemas de defensa antiaérea móvil S-400 Triumf superan a los análogos estadounidenses THAAD en cuanto a sus capacidades defensivas, reconoce el diario. No obstante, no es ni la superioridad técnica, ni el precio accesible de los sistemas rusos los factores que los hace tan atractivos.
"El mercado mundial de armas no está impulsado por la oferta y la demanda. Todo acuerdo importante de armas está altamente politizado. (…) Pero la intención anunciada de comprar [los S-400] ofrece una buena oportunidad para presentarse como un Estado soberano que no permite que los estadounidenses le impongan nada", resume el medio.
Esa tendencia se alimenta, además, con el hecho de que EEUU se ha convertido en "un socio difícil" para sus aliados. Los sistemas THAAD solo son entregados a un reducido grupo de socios de Washington después de un engorroso proceso de aprobación para su exportación. Los rusos, por otro lado, comparten sus tecnologías de defensa de manera menos selectiva y, a menudo, mucho más rápida, reafirma Die Welt.
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El S-400 es capaz de derribar blancos a una altura de hasta 30 kilómetros y, dependiendo del tipo de proyectil, en un rango de 120, 250 o 400 kilómetros. En comparación, el THAAD estadounidense solo puede ser utilizado para derribar misiles y no aviones. Además, tiene un rango máximo efectivo mucho más reducido que su análogo ruso.
