Allí, los guardias de seguridad confiscaron un conjunto de cuerdas de repuesto que el músico llevaba para su violonchelo, informa The Times of Israel. Incluso le amenazaron con quitar las que ya estaban colocadas en su instrumento musical, que tiene más de 300 años.
La explicación que le dieron fue que Peled podría usarlas "para estrangular" a alguien en el avión. Según reconoció el propio músico, es la primera vez que le ocurre algo así.
"Bueno, al menos no me quitaron el violonchelo con la excusa de que podría usar la pica del instrumento para apuñalar a alguien", dijo Peled a Classic FM.
El músico y profesor del Instituto Peabody de la Universidad Johns Hopkins, que fue nominado al premio Grammy, actuó con la orquestra filarmónica de Varsovia y estaba a punto de emprender el vuelo para seguir con su agenda.