"Tratan a sus mujeres como la mierda", afirmó el exjugador de hockey hielo canadiense Paul Bissonnette, en referencia a la experiencia de un amigo suyo en Rusia.
Por su parte, el estadounidense Ryan Whitney, que jugó en la temporada 2014-2015 en el club ruso Sochi, comentó que algunos de los jugadores rusos llevaban a sus mujeres a unos partidos y a sus amantes a otros.
Brent Sopel, que militó en distintos clubes rusos del 2011 al 2014, coincidió con Whitney y agregó que a los jugadores esto les importaba bien poco.
"Tratan a sus perros mejor que a sus mujeres. Piden a sus esposas que se vayan a la casa y les dicen que van a salir de fiesta (…) O pueden desaparecer por unos días sin decírselo a nadie. Y luego aparecer como si nada hubiera pasado", detalló Sopel.
Al ser preguntada si los deportistas debían disculparse, Pletneva dijo que los hombres que se permiten tales declaraciones no se disculpan.
"Esas personas no se disculpan, pero si se disculpasen, lo harían simplemente para que no los condenen. No se disculpan por decir tantas cosas ofensivas. Cualquier mujer es para su esposo la mejor. Por lo tanto, no hay nada que comentar", afirmó Pletneva.
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