"La actitud de la marina es ser mercaderes y empresarios con dinero del Estado, por eso al submarino le pasó esto", afirmó a Sputnik el suboficial retirado Jorge Esteban Quisbert.
Frente al Congreso, donde acompañaba a varios familiares de la tripulación, el marino retirado comentó que conocía a casi la mitad de los submarinistas que navegaban en el navío.
La jueza federal Marta Yáñez, que investiga desde el municipio santacruceño de Caleta Olivia (sur) lo sucedido con el submarino, no llamó todavía "a todos los oficiales y suboficiales de comunicación e inteligencia", agregó.
Los seres queridos de los submarinistas y todos los argentinos "nos merecemos que esto se apure y se aclare para que los culpables sean encarcelados", agregó Quisbert.
El marino retirado mantenía desplegada dos banderas en las que se podía leer: "Ara San Juan presente" y "fuerza camaradas".
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Añadió que pasara lo que pasara con el submarino "no fue falla de la tripulación".
"Me duele toda esta desidia que ha sucedido y que llevó a la muerte a mis 44 compañeros", añadió con un hilo de voz y lágrimas en los ojos.
Manifestación cada 15
Frente al Congreso de la capital argentina también estaba la hermana del suboficial segundo, tripulante del San Juan, Luis Marcelo Leiva, Natalia Leyva.
"Merecen que los busquen, ellos no son del mar, pertenecen a sus casas", afirmó la mujer.
Natalia recordó que el jueves se cumple la estadía mínima a la que se comprometió la empresa estadounidense Ocean Infinity para rastrear el submarino en el fondo del mar, 60 días operativos.
"Hay personal humano trabajando y la empresa rompió equipos y ahora se quiere ir porque se encuentra con el Mar Argentino muy dificultoso", afirmó.
Los familiares presentes frente al parlamento se prepararon para caminar, como el 15 de cada mes, hacia la sede del Ejecutivo, la Casa Rosada.
Una de las personas que acude puntualmente a cada cita convocada en Buenos Aires es Alicia, tía del cabo primero Daniel Alejandro Polo, también tripulante del submarino desaparecido.
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"Venimos cada 15 y vamos a seguir así hasta que nos digan dónde están y qué pasó, es lo único que pedimos", indicó.
De la tragedia tienen responsabilidad tanto el Gobierno de Mauricio Macri como la Armada, por el "abandono y desinterés" con que han sido tratados los submarinistas, opinó.
Macri acudió el jueves a un acto convocado por los seres queridos de la tripulación que se realizó en el comando naval de esa ciudad para recordar a los 44 submarinistas desaparecidos.
La Armada indicó que el submarino se contactó con tierra por última vez a las 7:19 hora local (10:19 GMT) de ese día, aunque después se dio a conocer que el último mensaje se había producido a las 8:52 hora local (11:52 GMT), cuando el buque informó que había ingresado agua de mar por el sistema de ventilación, lo que había provocado un principio de incendio.
Dos horas después, a las 10:51 hora local (13.51 GMT) se registró una explosión a 48,28 kilómetros de la última posición del buque, en coincidencia con el trayecto que cursaba hacia Mar del Plata.
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