"Este acuerdo no divide la migración en legal e ilegal, de lo que es muy fácil abusar en la práctica; a los países que ya han declarado que no apoyan este pacto, también añado a Polonia, que no tiene migrantes, pero sus políticos miran al futuro", dijo Zeman.
El primer ministro checo, Andrej Babis, declaró la semana pasado su rechazo al texto de la ONU.
Babis dijo que primero se retiró Estados Unidos, después Hungría y Austria, y ahora en Polonia se realizan debates sobre el tema.
Estados Unidos se retiró del acuerdo en 2017, Hungría en julio, Austria anunció su salida del pacto el pasado 31 de octubre.
Austria y Hungría mantienen una postura rígida contra la llegada de refugiados a la Unión Europea.
Las autoridades de los dos países construyeron kilómetros de vallas en sus fronteras para impedir la entrada de los refugiados.