"Si Bolsonaro radicaliza su discurso pierde posibilidad de hacer coaliciones"
Con una fuerza parlamentaria propia del 10% en la Cámara de Diputados, el flamante electo presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se enfrenta a varios desafíos. Entre los principales, tejer alianzas con otros sectores luego de una campaña en la que ubicó a todos los que no piensan como él en la vereda de enfrente.
De esta forma, su Partido Social Liberal, legalizado en 1998, salió de las sombras y se convirtió en un protagonista de primera línea política de la potencia regional. En un segundo plano quedó el Partido de los Trabajadores, cuyo candidato, Fernando Haddad, reunió 41% de adhesiones, casi 16 millones más que en la primera vuelta del 7 de octubre.
"Bolsonaro supo canalizar esa demanda de frustración y falta de perspectiva, con un antipetismo muy grande. Esta elección demostró que el discurso antisistema y de ser auténtico sin importar lo políticamente correcto" también comenzó a dar resultados en Latinoamérica, afirmó a Sputnik el politólogo Andrés del Río, en alusión a la impronta que le imprimió a la política internacional el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Y en este punto y en la falta de seguridad pública, centró sus discursos el candidato del PSL. "Todos aquellos que estaban en cuestiones de corrupción son los que hoy fueron elegidos. Esa es la contradicción de este momento: la supuesta lucha contra la corrupción y elegir autoridades que ya tienen casos de corrupción claramente".
Del Río mencionó las conclusiones de un trabajo sobre las perspectivas para el gobierno entrante. En este sentido identificó tres posibles caminos: que encabece un presidencialismo de coalición, lo cual lo llevaría "a quebrar promesas" por pactar con el sistema. Que se torne autoritario y tenga que "lidiar con la gente y la instituciones democráticas"; y por último que sea un gobierno "corto y errático".
Del Río señaló que con las alianzas actuales que hizo para las elecciones llega al 20% en Diputados entonces "difícilmente pueda aprobar cosas y entonces sea necesario hacer una colación mayor. Y ese es el gran desafío de Bolsonaro, si radicaliza el discurso pierde posibilidad de coalición".