"Hay que tomar en cuenta la experiencia de operaciones militares en Siria, el carácter de las amenazas potenciales, solucionar las tareas que se hacen cada vez más difíciles y multiaspectuales", dijo.
"Es nuestra obligación hacer todo lo posible para proteger la patria de cualquier amenaza de la mejor manera posible", afirmó el presidente.
Por lo tanto, el Ejército y la Armada del país continuarán modernizándose, expresó Putin. "Esto se realizará, en primer lugar, en el marco del nuevo programa estatal de armamento, que se está implementando desde este año".
"El programa se centra en el desarrollo y despliegue de modelos prometedores de armas. Muchos de ellos pronto estarán listos para la producción en serie. Sus características tácticas y técnicas adelantan significativamente los desarrollos extranjeros, y algunos simplemente no tienen análogos", dijo Putin.
Al mismo tiempo, el líder ruso destacó que Rusia no amenaza a nadie y cumple sus compromisos para el control de armas y la seguridad internacional.
"Rusia no amenaza a nadie, estamos cumpliendo estrictamente las obligaciones que asumimos en esfera de seguridad internacional y control de armas", dijo.
Además: Putin, preocupado por las actuaciones de EEUU en los tratados sobre el control de armas
Añadió que el país está siempre abierto "para el trabajo constructivo con socios en intereses de la estabilidad".
En marzo de 2016, Rusia procedió a una retirada parcial de su grupo militar de Siria, al dar por cumplida la misión.
A principios de enero de 2017, el Ministerio de Defensa ruso anunció un segundo repliegue del contingente militar emplazado en Siria.
El 6 de diciembre de 2017 el Estado Mayor General de Rusia declaró que todos los territorios controlados antes por los terroristas de ISIS en Siria fueron liberados, tras lo cual Putin ordenó el tercer recorte del contingente ruso emplazado en el país árabe.
Vídeo: Más allá de los campos de batalla: la 'ayuda invisible' de Rusia en Siria
De momento Rusia mantiene presencia militar en la base aérea de Hmeymim y en el puerto de Tartus para poder enviar refuerzos en caso necesario.