"Está totalmente confirmado, el consorcio suizo-alemán estará aquí el 30 (de octubre) y se reunirá con el ministro de Obras Públicas (Milton Claros) y con otras autoridades para la toma de decisiones sobre el corredor", indicó la fuente.
El ministro de Obras Públicas dijo horas antes a la radio estatal que el componente boliviano del Corredor Ferroviario Bioceánico de Integración (CFBI), entre los puertos de Santos en el sur de Brasil e Ilo en el suroeste de Perú, estaba "avanzado al punto de que es oportuno ya tomar decisiones sobre el abanico de posibilidades de inversiones".
De los casi 4.000 kilómetros del futuro corredor, unos 1.800 kilómetros corresponden a vías por construir o rehabilitar en Bolivia, mientras que en Brasil se deben hacer obras de modernización y en Perú trabajos de adecuación de una vía ya construida y su prolongación hasta la frontera boliviana.
Claros dijo a principios de octubre, en una entrevista con Sputnik, que Bolivia prevé iniciar en 2019 las obras en su territorio.
Explicó que Bolivia pretende que sus inversiones en el corredor, que sumarán varios miles de millones de dólares, sean cubiertas en parte con el consorcio suizo-alemán u otros capitalistas, que participarían en calidad de socios del proyecto y no solo inversionistas o proveedores de tecnología.
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El ministro dijo que ese consorcio presentará el 30 de octubre su contrapropuesta final sobre la asociación público-privada que le planteó el Gobierno boliviano para definir de inmediato las condiciones de los estudios finales de preinversión e inversión.
"Con estos empresarios hablamos tanto de los 1.800 kilómetros de tramos que hay que construir o reconstruir en Bolivia, además de obras también nuevas en parte de Perú y de la rehabilitación integral de la vía en el tramo brasileño, coordinando por supuesto con esos países", agregó.
El presidente Evo Morales impulsa el CFBI como obra que dará a Bolivia accesos marítimos en Brasil y Perú que compensarían parcialmente la condición de mediterraneidad que le dejó una guerra con Chile del siglo XIX.
Morales ratificó la importancia del tren bioceánico luego de la derrota que sufrió Bolivia el 1 de este mes en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que rechazó su demanda de que Chile sea obligado a negociar una salida boliviana soberana al océano Pacífico.
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Además de Bolivia, Brasil y Perú, el CBFI integrará también a Paraguay, con un ramal ferroviario desde el sudeste boliviano, según los acuerdos preliminares.