"Si Estados Unidos realiza sus intenciones de abandonar ese tratado, el sistema de acuerdos sobre la seguridad estratégica sufriría un serio daño, incluso un daño irreparable", dijo el diplomático.
Esta iniciativa fue avanzada por el presidente Vladímir Putin en julio pasado.
"Hasta ahora no hemos recibido ninguna respuesta y espero que nuestros socios norteamericanos no demoren mucho con las respuestas a las iniciativas rusas", apuntó el embajador.
El 21 de octubre, el presidente de EEUU, Donald Trump, declaró que su país abandonaría el Tratado INF alegando violaciones del acuerdo por parte de Rusia.
El Kremlin declaró el lunes que las declaraciones de Trump provocan preocupación, ya que "la medida, una vez puesta en práctica, hará el mundo más peligroso".
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El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, comentó que Rusia sigue comprometida con las cláusulas del acuerdo y advirtió que la anulación del tratado perjudicaría la estabilidad y la seguridad mundiales.
Rusia y EEUU se han acusado mutuamente en varias ocasiones de desarrollar sistemas que violan este pacto.
En cuanto al Tratado START III, fue firmado por los dos países en abril de 2010 en Praga en sustitución de los dos acuerdos anteriores, el START I de 1991 y el Tratado de Reducciones de Armas Ofensivas Estratégicas de 2002.
El START III entró en vigor en febrero de 2011 y obliga a Rusia y EEUU a recortar y limitar el número de armas estratégicas.
Además, las partes están obligadas a intercambiar cada seis meses datos sobre sus arsenales estratégicos.
