"Desde el viernes pasado, cuando irrumpió en nuestra frontera sur una caravana integrada por migrantes que buscan llegar a los Estados Unidos, el Gobierno de México, en apego estricto a su derecho, a lo que mandata nuestra Constitución y las leyes en materia migratoria, estableció los mecanismos para buscar una migración ordenada y apegada a derecho", expresó el mandatario en un discurso en el Foro México Cumbre de Negocios que se celebra en la ciudad de Guadalajara (centro).
Asimismo, destacó que "haya integrantes de esta caravana que han atendido la recomendación del Gobierno de México para iniciar los procesos de solicitud de refugio, y poder tener una condición migrante ordenada y legal".
El presidente de México explicó además que "solamente al amparo de una migración y de un tratamiento legal al ingresar a nuestro país es como podrán tener eventualmente acceso a este derecho que nuestra Constitución consagra".
Peña Nieto advirtió a quienes optaron por otras vía ilegales, cruzando el río Suchiate, frontera natural con Guatemala o recorriendo rutas no autorizadas, que "difícilmente les permitirá a los integrantes de esta caravana cumplir con su objetivo", en referencia a las detenciones y deportaciones a sus países de origen.
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Una segmento de la caravana comenzó a caminar el lunes hacia el municipio de Huixtla, a unos 40 kilómetros de la ciudad Tapachula, estado de Chiapas (sur), fronterizo con Guatemala, donde esperan pernoctar.
Un balance oficial de las autoridades mexicanas indica que unas 900 personas han sido atendidas "de forma ordenada y segura", mientras que otros 900 migrantes intentaron pasar por vías "informales, arriesgando sus vidas", en el fronterizo río Suchiate y otras rutas ilegales, a quienes las autoridades continuarán deteniendo y deportando.
Al menos otras 500 personas se ofrecieron para regresar a sus países y unos 2.000 migrantes más permanecen en el puente fronterizo intentando el engorroso trámite, para un total de más 4.300 personas en la caravana, según el balance oficial.