En las últimas semanas Podemos alcanzó un acuerdo con el Gobierno socialista que preside Pedro Sánchez para diseñar unas cuentas que incluyen como medida estrella un incremento del salario mínimo, además de aumentar varias partidas de gasto social y subir la presión fiscal a grandes fortunas y corporaciones.
En una entrevista concedida este 19 de octubre a Antena 3, Pablo Iglesias afirmó que sería "contraproducente" que el Gobierno se inmiscuya de esa manera en asuntos judiciales.
"No me parece sensato pedirle a un Gobierno que presione", dijo Iglesias antes de añadir que "la Fiscalía hará lo que tenga que hacer jurídicamente".
"Todo lo que sea avanzar en el diálogo, incluso aunque haya muchos desacuerdos, es preferible a la confrontación", añadió.
Está previsto que el encuentro de Iglesias con Junqueras, que se producirá a primera hora de la tarde de este viernes, también sirva para tratar la situación en Cataluña y para visitar a otros independentistas presos, como los líderes sociales Jordi Cuixart y Jordi Sànchez.
La visita de Iglesias al líder de ERC generó en los últimos días una gran polémica en España.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, agradeció el 18 de octubre al líder de Podemos su apoyo en lo referente al presupuesto, pero le recordó que "las negociaciones en nombre del Gobierno las hace el Gobierno".
Por parte de la oposición, sobre todo desde el Partido Popular y Ciudadanos, esta acción fue duramente criticada.
El diputado Fernando Martínez Maíllo, del Partido Popular, consideró este 18 de octubre como "surrealista" y "una vergüenza" que Pablo Iglesias acuda a un centro penitenciario a negociar los Presupuestos Generales del Estado.
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Por su parte, el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, calificó de "esperpento" y de "dramático" que "separatistas y populistas" estén negociando los presupuestos "en la cárcel".
