Al mismo tiempo, en agosto, Rusia redistribuyó sus inversiones en favor de los valores del Tesoro a corto plazo. Si a fines de julio tenía 9.100 millones de dólares en papeles a largo plazo (con vencimiento a más de un año) y 5.800 millones de dólares a corto plazo, a fines de agosto se trataba de 3.400 millones de dólares a largo plazo y 10.700 millones de dólares a corto plazo.
Por primera vez desde al menos 2011, Rusia tiene más papeles cortos que largos, subraya la agencia rusa RBC tras analizar los datos del Tesoro de EEUU.
Rusia aún no está incluida en la lista de 31 países que son los principales tenedores de bonos de EEUU. Moscú lo abandonó en mayo después de reducir drásticamente su inversión a 14.900 millones de dólares. De marzo a mayo, Rusia vendió valores del Gobierno de EEUU por un monto de 80.000 millones de dólares. Hasta marzo de 2018, las inversiones rusas en bonos del Tesoro superaban 100.000 millones de dólares.
China sigue siendo el mayor tenedor de bonos de EEUU. Sin embargo, en agosto también redujo su inversión, así como lo hizo Japón. Brasil, por el contrario, aumentó su carpeta.