"Hemos removido cielo y tierra y hemos superado el punto de no retorno… Hemos llegado a una etapa en que debemos asestar el golpe más duro que se pueda imaginar contra Hamás", declaró Lieberman.
"Antes de ir a la guerra en Gaza, debemos agotar todas las demás opciones, y no hemos escatimado esfuerzos en ello… Hemos intentado agotar todas las posibilidades", enfatizó.
Para Lieberman, "Hamás ha convertido la violencia en la frontera en un arma estratégica, con la que esperan erosionar la contención y presionar sobre el público israelí y el gobierno israelíes".
"Hamás está resuelto a continuar la violencia hasta que el bloqueo se levante por completo sin llegar a un acuerdo, especialmente en lo que respecta al intercambio de prisioneros, y sin renunciar al artículo principal de su carta: la destrucción del Estado de Israel", afirmó el titular de Defensa.
A juicio de Lieberman, el ejército está preparado para dar un golpe a Hamás.
"Las FDI no han estado mejor preparadas para la guerra desde 1967", afirmó. Al mismo tiempo, reconoció que "siempre hay cosas que mejorar hablando de una maquinaria enorme como las FDI, con 700.000 efectivos y decenas de miles de instrumentos".
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