Un grupo de 36 efectivos del Centro Internacional de Desminado de las Fuerzas Armadas de Rusia llegó el jueves a la localidad de Lak Sao, en la provincia de Bolikhamxai, a 350 kilómetros de la capital de Laos, Vientián, donde deberán realizar actividades de desminado humanitario, según el comunicado.
Se señala que los militares rusos, junto con zapadores laosianos, ya realizaron un reconocimiento en la región.
"Uno de los aspectos problemáticos es buscar y desactivar bombas aéreas no detonadas, que están a una profundidad desde 40 centímetros a 2,5 metros", destaca el texto.
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No obstante, "para ejecutar las tareas, los militares cuentan con un equipo de desminado de vanguardia y protección personal de los zapadores", asegura.