"A la fecha de hoy se cumplen 63 días desde la última reunión de la mesa de Conversaciones entre el Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional. Nuestra Delegación en todo este tiempo se ha mantenido en la Mesa, a la espera que el Gobierno honre los Acuerdos de paz firmados con el Estado y envíe su Delegación, para darle continuidad a este proceso de solución política del conflicto, que hemos emprendido", expresó el grupo armado en una misiva dirigida a los integrantes de la Comisión de Paz del Senado.
El Gobierno está colocando exigencias unilaterales, que rompen la bilateralidad de un proceso de negociación, con los que desconoce acuerdos previos. Si (el presidente Iván) Duque considera que se requieren ajustes a los compromisos existentes, estos deben ser examinados y acordados por las dos partes" en la mesa de negociaciones de La Habana, afirma el ELN en la misiva.
Duque dijo la semana pasada en rueda de prensa, que tiene "toda la voluntad de poder establecer un diálogo con el ELN", pero espera que la base para construirlo "sea primero la liberación de todos los secuestrados y, segundo, que se le ponga fin a las actividades criminales".
El ELN rechazó estas declaraciones en su momento diciendo que el mandatario intenta anular y además desconoce los acuerdos de paz logrados en la administración del exmandatario Juan Manuel Santos (2010-2018).
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La última guerrilla activa en Colombia llevó adelante seis ciclos de conversaciones de paz con el Gobierno de Santos con el fin de poner fin a más de medio siglo de confrontación armada y alcanzar un armisticio similar al que se logró en noviembre de 2016 con la entonces guerrilla de las FARC, hoy convertida en partido político de izquierda.
La administración de Duque afirma que el ELN tiene más personas secuestradas de las que dice, algunas que mantendrían cautivas desde 2002, aunque la guerrilla rechaza esa acusación.