Este fue el primer entrenamiento conjunto de las fuerzas marítimas y aeroespaciales que el Ejército ruso efectuó en las aguas del Mediterráneo.
En las pruebas militares participaron 26 buques de guerra, incluidos dos submarinos. Las aeronaves que formaron parte de las maniobras fueron Tu-160, Tu-142, Il-38, Su-33 y Su-30SM.
Durante el evento, los marineros y aviadores entrenaron varias tareas para hacer frente al ataque del enemigo simbólico. En particular, combate antibuques, defensa antiaérea, protección de las vías marítimas, lucha contra la piratería y socorro a buques en peligro.
Además, los militares llevaron a cabo disparos de misiles y de artillería. Los marinos también lanzaron cargas de profundidad, lanzados desde el sistema RBU-6000.
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