"Quisiera decir que en los próximos cuatro años pudiéramos por lo menos reducir más de 140.000 ó 150.000 hectáreas; no es fácil, pero es la meta que queremos trazarnos", dijo Duque, según declaraciones difundidas por su despacho.
Según Duque, su administración buscará volver a las fumigaciones aéreas pero ajustada a los protocolos de la Corte.
Las declaraciones de Duque se conocen luego de que el martes sostuvo un encuentro, en Bogotá, con altos funcionarios del Gobierno de EEUU para evaluar el aumento de la cooperación bilateral en la lucha contra el narcotráfico.
La delegación estuvo encabezada por Jim Carroll, subdirector de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas, organismo que sostiene que las hectáreas cultivadas con coca en Colombia aumentaron 11% entre 2016 y 2017, al pasar de 188.000 a 209.000, y que prevé que al cierre de 2018 pueda alcanzar las 240.000 hectáreas.
Asimismo, según dicha oficina, la producción de cocaína se incrementó en 19%, al pasar de 772 toneladas en 2016 a 921 toneladas en 2017.
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"La fumigación aérea es un elemento de esta estrategia, hay que diseñarla muy bien", dijo el nuevo embajador en diálogo con la emisora colombiana Blu Radio.
Según Santos, se buscará así "combatir un problema que es de Colombia", ya que sin esa aspersión no se podrá combatir ni ganarle al mexicano Cartel de Sinaloa, "que es el que está detrás de estos cultivos".
El embajador designado consideró que si con el apoyo de EEUU, Colombia puede erradicar "60, 70, 80.000 hectáreas de coca de cultivos industriales, pues hay que hacerlo".
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Aunque en 2017 el Gobierno de Trump certificó a Colombia en materia de lucha contra las drogas, advirtió que el país debe dar resultados efectivos en su estrategia para reducir los cultivos ilícitos, lo cual confía que se logre bajo el nuevo Gobierno de Duque.
El martes, el propio Trump señaló que Colombia, México y Afganistán "se quedaron atrás" en la lucha contra las drogas.