"Esta mañana, la defensora de derechos del Menor, junto con Borís Dzhanáyev, representante plenipotenciario de la República de Osetia del Norte-Alania ante el presidente de la Federación Rusa, y los representantes de la diáspora de la República, colocaron una ofrenda floral al monumento a los defensores de los niños caídos en Beslán", se comunica en el informe publicado en la cuenta oficial de la funcionaria en Facebook.
Kuznetsova realzó la importancia de recordar aquella tragedia y la hazaña de los oficiales fallecidos.
"En memoria de los niños y de aquellos que los defendían en la escuela tomada por los terroristas, es importante mirarnos, preguntarnos a nosotros mismos si estamos haciendo todo lo posible para proteger a nuestros pequeños", escribió.
Los terroristas secuestraron a un millar de personas, incluyendo a niños pequeños, que permanecieron bloqueados en el gimnasio de la escuela durante tres días, sin beber ni comer.
La crisis, que culminó con una operación de asalto al centro educativo, se saldó con 335 muertos, incluidos 318 rehenes —de los cuales 186 eran niños—, 10 empleados del Servicio Federal de Seguridad (FSB), dos funcionarios del Ministerio de Situaciones de Emergencia y 15 policías.
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Los heridos se situaron en 810 personas entre rehenes, oficiales de las fuerzas especiales del FSB, policías y militares.