"Todos estos factores se tomarán en cuenta para preparar oportunamente tanto medidas diplomáticas como militares", dijo Barbin en el foro internacional de defensa Army 2018 que se lleva a cabo en la localidad de Kúbinka, a las afueras de Moscú, del 21 al 26 de este mes.
La tensión con Occidente, agregó, salpicó también a la región ártica con proyectos petroleros suspendidos, contactos militares congelados, una mayor implicación de la OTAN en la zona y el incremento de la presencia del bloque bélico cerca de las fronteras de Rusia.
Barbin indicó además que comenzó a operar en el norte del Atlántico la Segunda Flota de Estados Unidos.
"Pese a todo, nuestra opción es el diálogo civilizado para resolver, mediante la cooperación internacional, todas las discrepancias y garantizar la paz y la estabilidad en el Ártico", remarcó.
Entre octubre y noviembre de este año Noruega acogerá las maniobras militares de la OTAN, las mayores desde 2002, en las que participarán unos 40.000 soldados, 150 aviones y 70 buques de guerra.
Paralelamente, la organización militar sigue adelante con el emplazamiento de elementos del escudo antimisiles estadounidense en Europa.
A mediados de mayo de 2016, la OTAN puso en servicio el sistema estadounidense Aegis Ashore en la base rumana de Deveselu, a unos 600 kilómetros al oeste de la península rusa de Crimea.
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Rusia ha protestado por la concentración de tropas cerca de sus fronteras ya que, denuncia, supone una amenaza para su seguridad nacional.
