El fiscal Maurício Gotardo Gerun aseguró que la decisión del Comité es "precipitada" y que por lo tanto "se vuelve inejecutable", según un dictamen al que tuvo acceso Sputnik.
"No es porque el agraviante (Lula) esté preso que no puede aspirar a la Presidencia, sino porque posee una condena penal confirmada en segunda instancia", dijo Gerun, representante del Ministerio Público ante el Tribunal Federal de la Cuarta Región con sede en Porto Alegre (sur).
La ley brasileña de Ficha Limpia, promulgada por el propio Lula en 2010, impide que una persona con una condena en segunda instancia pueda presentarse a las elecciones.
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El fiscal sostuvo que la constitucionalidad de esa ley fue confirmada por la máxima corte del país, el Supremo Tribunal Federal.
Gerun también criticó que el Comité de Derechos Humanos de la ONU, encargado de supervisar el respeto del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos del cual Brasil es parte, quiera interferir en el Poder Judicial brasileño.
Lula solo podrá conceder entrevistas a la prensa cuando el Tribunal Superior Electoral lo confirme como candidato, algo que aún no ha ocurrido, sostuvo el fiscal.
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Una de las peticiones del Comité de Derechos Humanos de la ONU era que Lula tuviera un acceso adecuado a la prensa y a los miembros del Partido de los Trabajadores (PT) para desarrollar su campaña electoral.
El expresidente fue proclamado candidato presidencial del PT para los comicios que se celebrarán en octubre y figura como favorito en todas las encuestas.
Sin embargo, es muy probable que el TSE rechace su candidatura y que su candidato a vicepresidente, Fernando Haddad, lo sustituya a última hora.