Ernesto Samper: "Sería necesario un Brexit para negociar salida colombiana de Unasur"
"Hace unos pocos días estuvo por aca en Colombia el presidente Evo Morales [en ejercicio de la presidencia pro tempore de Unasur] y estuvimos mirando fórmulas de salida", a la situación, expresó Samper, que dejó la secretaria del bloque en enero de 2017. "Él las está trabajando a nivel diplomático. Tengo la mayor confianza en que van a encontrar una salida muy pronto", acotó.
En este sentido reconoció que "me duele que una entidad como Unasur, que llenó un espacio muy grande de integración, no solamente como libre comercio, sino también como movilidad de personas, derechos humanos, poder llegar a culminar procesos como la paz en Colombia, que todo ese esfuerzo que hemos hecho, se pierda por una coyuntura que debería resolverse en el mismo escenario de Unasur".
Más aún luego de que el nuevo presidente colombiano, Iván Duque, confirmara una promesa de campaña de retirar al país del bloque regional.
Preguntado Samper sobre si había mantenido contacto con el nuevo gobierno, explicó que tiene "un buen nivel de relación con el nuevo canciller", Carlos Holmes Trujillo, y compartió con Sputnik lo conversado con el jefe de la diplomacia colombiana.
"Mi opinión, es que esto no es tan sencillo. Las consultas que van a hacer con otros países son indispensables para acordar una posición conjunta, que espero que no sea la de retirarse sino la de quedarse", afirmó.
"De la misma manera le hablé [al canciller] que si la decisión de Colombia es la de irse, entonces sería necesario hacer una especie de Brexit latinoamericano, para negociar la salida y que todos estos beneficios que puede recibir de la integración, pues que no queden en el aire".
Samper dijo estar dolido por "la coyuntura que está atravesando la región", caracterizada "entre otras amenazas por una política exterior agresiva de los EEUU", a quien responsabilizó por desdeñar los temas de la agenda regional. Entre ellos mencionó la restricción de migraciones, la construcción de muros, el incumplimiento de objetivos de cambio climático y la suba de aranceles.
"Todos estos temas atentan contra la región como tal y por eso no entiendo que en momentos que enfrentamos una de las peores tormentas internacionales estemos hablando de desintegrarnos, dividirnos, y mucho menos de ir a hacer causa común en un escenario de integración interamericano en el cual los EEUU hacen valer las prioridades de su agenda".
Se refería a que por la vía de los hechos y paulatinamente la Organización de Estados Americanos (OEA) se ha convertido nuevamente en el ámbito donde se discute la política latinoamericana.
"Discutir…es un eufemismo. En la OEA se impone la política norteamericana, es un retroceso histórico", concluyó.